Luego de explicar en la primera parte la importancia de realizar análisis de negocios en su empresa y proyectos, en esta edición les presentamos los pasos siguientes para hacer un análisis de negocio eficiente para que su empresa pueda escalar de manera sustentable y sólida.
Una vez evaluados los resultados que se obtuvieron hasta el momento y encontrado las fallas que derivaron en pérdidas, se comenzarán a proyectar nuevos objetivos y un mejor plan de negocio o nuevas prácticas de trabajo en los proyectos.
Paso 3: Comenzar a trazar un plan concreto y detallado
Esta instancia, es el inicio que guía todos los pasos subsiguientes del proceso del análisis empresarial. Es un primer pantallazo de lo que será el camino a recorrer para realizar una transformación en el negocio, donde se conocerá y pondrá en práctica nuevas acciones propias del nuevo plan de negocios. En este paso, se comenzará a trazar planes que involucran desde los colaboradores externos, los recursos y el presupuesto, hasta el impacto en los directivos y en nuestros clientes.
Aquí se comienza a planear un enfoque de solución para la empresa y un nuevo camino. Si está analizando un proyecto, se va a determinar la naturaleza del mismo, cómo serán los objetivos comerciales a seguir, los recursos involucrados y la estimación de tiempo laboral que le deberá dedicar al cliente para que la cuenta sea rentable. Otra parte importante del plan, es antelar posibles crisis, detallando soluciones a cambios que pueden surgir en el proceso de desarrollo, para llegar a los objetivos comerciales planteados en primer instancia. Para esto, es posible obtener una estimación más certera de los tiempos y los gastos invertidos en el desarrollo de un proyecto, contemplando experiencias anteriores.
Para éste analisis, generalmente se trabajará en coordinación con el Project Manager, con quien definirá actividades relacionadas con la formación del equipo de trabajo y la capacidad laboral que destinará, para generar una óptima rentabilidad.
Paso 4: analizar resultados y definir los procedimientos que se van a sistematizar
Luego del análisis y con el nuevo plan puesto en acción, sólo queda evaluar la parte más importante, el impacto del proyecto. En esta etapa, es fundamental que se trabaje con un software que permita controlar el rendimiento y la correcta aplicación del nuevo plan y que además ayuda a recopilar datos en tiempo real, con lo que se podrá continuar analizando y mejorando resultados constantemente.
Una manera muy efectiva de obtener visibilidad de los rendimientos de la empresa en las herramientas, es con métricas. Las métricas muestran el resultado de las horas disponibles y trabajadas, el rendimiento de los recursos, las ganancias generadas, etc.
En COR, la función de métricas muestra la capacidad laboral y la rentabilidad de los proyectos, en tiempo real. Dando la posibilidad de modificar los objetivos propuestos, según lo analizado, con fundamentos reales y apoyando las decisiones en datos certeros. Ésto sirve como guía de referencia rápida al analista para reunir y gestionar los requisitos y cambios necesarios en el nuevo plan, resultado de lo analizado en los pasos 1 y 2.
A esta altura, si todo siguió el curso estipulado, los resultados comerciales ya se definieron, los detalles se trabajaron, los problemas grandes y pequeños se resolvieron, los equipos se constituyeron, la tecnología se implementó y los usuarios comerciales se capacitaron para cambiar la forma en que trabajan.
Entonces se pasa al último paso, sistematizar esa manera “ideal” de trabajo. La sistematización de procesos permite generar ganancias rápidas y reducir el tiempo, para cumplir con fechas de entrega en un menor rango de tiempo.
En este punto, los analistas deben secuenciar concienzudamente los procesos de trabajo a fin de hacer los equipos lo más efectivos posibles. El propósito es reducir la ambigüedad y la complejidad que se presentan cada vez que se pone en marcha un nuevo trabajo o cuando ingresa un nuevo recurso a la empresa. Documentar los procesos y establecerlos es una tarea clave para el crecimiento de toda empresa.
En la vorágine de cambios, es fácil que se pierda la noción del panorama general. ¿Por qué se hacen todos estos cambios y qué valor aportan a la organización? Y, lo que es más importante, ¿todavía se siguen presentando problemas? Es decir, la solución que se plantea ¿realmente entrega el valor que originalmente habíamos anticipado?
Nada crea un impulso más positivo dentro de una organización que un historial de proyectos exitosos. Pero si no nos detenemos y evaluamos el valor creado por la solución, ¿cómo se sabe si realmente se esta operando desde un historial de éxito? Entonces, este círculo nunca se termina, el análisis de negocio es una práctica que debe realizarse continuamente para saber que estamos transitando el camino correcto.
Ahora que conociste todos los beneficios, sabes todos los pasos que se necesitan para realizarlo de manera efectiva y tenes las herramientas necesarias para que tu empresa crezca de manera escalable. ¿Qué esperas?
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